Lamentablemente, los trenes circulan cada cinco u ocho minutos y, antes de entrar en el vestíbulo del Metro, policías piden a sospechosos de aspecto foráneo que pasen a través del detector metálico, para luego revisar documentos de identidad, aunque se cuente con la acreditación. Como sea, la seguridad está por sobre el régimen de exención de visados y de la creación de un ambiente festivo en la ciudad. La Villa Universitaria está ubicada a once kilómetros del centro de la ciudad y, de los famosos Kremlin y, de la emblemática mezquita de Kul Sharif. Los organizadores están seguros de que los deportistas podrán, en veinte minutos, alcanzar los lugares que sean de las competiciones, merced a las franjas asignadas en las vías, que los conductores miran con malos ojos, debido a los atascos que han debido sufrir en los últimos cinco años de preparación para estos Juegos Mundiales Universitarios.
Pero, ya falta menos para el inicio de los Juegos y, las últimas expectativas son compartidas con nuestra emisora por Larisa Sulima, subdirectora general, jefa del equipo del Comité organizador de Kazán-2013:
—Larisa Olegovna, Kazán está casi a punto, ¿cuáles ha sido el momento más difícil en el proceso de la preparación de los Juegos?
—El momento más difícil es quizás el de ahora, cuando la cuenta regresiva avanza hacia la fecha de su inicio, el 6 de julio, y en que cada segundo y minuto corren, tanto más veloces, como muy lentamente, aunque resulte extraño decirlo. Hemos trabajado para regalar a los asistentes un cuadro ideal de la ciudad y una Universiada inolvidable, y esperamos el momento de su llegada para que vean, por fin, todo esto.
—¿Lograron que los habitantes de Kazán vieran por fin ese cuadro ideal con sus ojos, y que sus dudas se convirtiesen en esa admiración que debe ser lo principal en la fiesta deportiva venidera?
—A los habitantes de Kazán, que somos todos, decimos, “gracias” por la paciencia manifestada todo este tiempo. Nos alegra que comiencen a ver los frutos de nuestra labor con sus propios ojos. Y al margen de todas las dudas, la transformación prodigiosa de nuestra ciudad es ya un hecho. Antes sentía yo misma vergüenza de recibir a amigos en nuestro aeropuerto, el que no se parecía en nada a los aeropuertos capitalinos modernos. Mientras que ahora, aparte de que fue modernizado  completamente, es posible llegar hasta él en veinte minutos en un tren de velocidad, como en cualquier ciudad contemporánea del mundo. Además, han sido construidas más de sesenta instalaciones deportivas, y no solo de este tipo, las que después de los Juegos quedarán a disposición de la ciudadanía. La Villa Universitaria, en la que nos encontramos ahora, en septiembre acogerá a trece mil estudiantes de distintas ciudades, no solo de Tatarstán, sino de toda Rusia y el mundo. Es más, estoy segura de que nuestra Universiada será una fiesta inolvidable del deporte: por primera vez serán disputados trescientos cincuenta y un juegos de medallas, en veintisiete deportes, incluso más que en los JJOO de Londres. Las entradas para la ceremonia de inauguración y de clausura ya están agotadas, así como  las competiciónes finales de los torneos más cotizados, como natación, lucha, atletismo. La selección de Rusia estará representada en ellos por un número record de campeones olímpicos, por veinticinco.
—Además del programa deportivo, está el programa cultural de los Juegos Mundiales Universitarios. ¿En qué consiste este programa?
—La Universiada cultural consiste en un programa de envergadura que comprende distintas actividades. En los últimos dos años se ha venido efectuando el concurso nacional, Rusia-Kazán-Universiada, en el que han participado más de cuatro mil conjuntos artísticos estudiantiles. Los ganadores del concurso actuarán en el escenario del Parque de los Juegos, ante el público de todo el mundo, en el que exhibirán toda la diversidad de la cultura rusa y tártara. Para las ceremonias de inauguración y de clausura hemos invitado a artistas internacionales, se está en conversaciones con animadores de renombre para conducir el espectáculo final, en el que agradeceremos a los veintiséis mil voluntarios de la Universiada.
—¿Cuál es su último parabién para la vigésima séptima edición de los Juegos Mundiales Universitarios de verano de Kazán-2013?
—Quisiera ver la alegría en los ojos de todos los que se encuentren en nuestra ciudad del 6 al 17 de julio. Y además, que después de estos Juegos, el número mayor posible de jóvenes comience a practicar deportes. El deportista sabe revelarse, distribuir correctamente su tiempo, no temer los desafíos, desea perfeccionarse continuamente y descubrir algo nuevo. Todas estas cualidades son la llave del éxito para la juventud en el mundo contemporáneo.
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