La hija de uno de los más famosos detectives privados de EEUU Fred Otash, Colleen, publicó algunos de los documentos de su difunto padre. En uno de ellos el detective afirma que a petición de un cliente suyo había instalado un dispositivo de escucha en la casa de Marilyn Monroe.Según Otash, en el día de muerte de la actriz, 5 de agosto de 1963, en su casa estuvieron los hermanos Robert y John F. Kennedy. Este día, Monroe y Kennedy tuvieron una fuerte discusión, durante la cual Robert la estranguló con una almohada.Esta no es la primera versión de la implicación de los hermanos en la muerte del símbolo sexual mundial.
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